miércoles, 30 de mayo de 2012

Aprendiendo Cartografía.

   Si algún navegante de la red cae en este mi blog esperando encontrar alguna entrada relacionada con la cartografía de orientación espero que esta les sea de interés. Ignoro si ya lo he recomendado tiempo atrás, en cualquier caso no viene mal un recordatorio. Se trata de la sección que OLLES MAPS tiene en Facebook. Olles maps lo lleva Alles Hejna, cartógrafo checo de amplia experiencia y que, echando un vistazo a sus comentarios, se nota que es un verdadero apasionado de su trabajo.

   Alles ha trabajado también por España y en concreto realizó, junto con su hermano Martin y su colega Jan Drbal, buena parte del plano de Navas del Pinar. Su trabajo no fue muy agradable por la mala calidad del plano base y por el mal tiempo que reinó durante su estancia pero, a pesar de ello, el resultado fue muy bueno. Últimamente ha trabajado en Canadá y Turquía y continúa con su labor de difusión en torno a todo lo relacionado con la cartografía de orientación desde un punto de vista general haciendo hincapié ora en novedades tecnológicas ora en particularidades de los lugares que visita.

   Una de sus aportaciones más sorprendentes fue la inclusión íntegra de una tesina elaborada por el orientador finlandés Marten Böstrom en la que detalla el levantamiento de dos planos de orientación con ayuda de un computador tipo “tablet” al que acopló un gps. Los planos fueron elaborados en un entorno urbano de Helsinki y en un bosque de Kenia. En el documento se narra todo el proceso de elaboración de los planos (en inglés) y es bastante interesante.

   Por otra parte me gustaría compartir con los curiosos por temas de elaboración de planos una de mis últimas experiencias:

   No hace mucho fui requerido para colaborar en un proyecto cartográfico y, aunque en un principio me mostré reticente por falta de tiempo, finalmente acepté el encargo. Se trataba de cartografiar un kilómetro cuadrado con un arbolado bastante denso, un desnivel de moderado a fuerte y con variedad de zonas; algunas de ellas muy cargadas de elementos rocosos. Me gustaría aportar alguna pequeña imagen pero dicha zona se usará en futuras competiciones y prefiero no desvelar ningún detalle en absoluto.

   ¿Cómo afrontar el trabajo cuando del plano base y de la ortofoto no se puede obtener mucha información?

   Pues yo me aferré a los elementos “seguros”, con un posicionamiento en el que podía confiar acerca de su precisión para empezar a trabajar a partir de ellos con rumbos y distancias. En plena ladera, a veces con arbustos de por medio, la medición de distancias puede no ser cómoda ni eficaz con métodos tradicionales como el talonamiento o el “ojímetro” por lo que me hice con un aparato llamado telémetro e ignoro la razón por la cual no había oído hablar del citado instrumento a colegas cartógrafos cuando se trata de una ayuda tecnológica que aporta rapidez, precisión y comodidad a la hora de hacer el trabajo de campo.

   El citado aparato viene usándose en otras actividades “outdoor” como la caza o el golf y su precio se mueve en un amplio rango de cifras, desde los 200€ aproximadamente hasta los 600€ más o menos. Su funcionamiento se basa en la emisión y recepción de un haz de luz láser; el telémetro obtiene la distancia midiendo el tiempo que el rayo tarda en volver.

   201916

   Yo en concreto compré un telémetro marca “Bushnell” modelo Sport 450. Tiene un alcance de casi 1.000 metros si se apunta a un objeto reflectante, o sea, mucho más que suficiente para las distancias que yo necesitaba medir en un entorno más cercano, no superiores a unos 50 metros. Su peso y tamaño son muy manejables y es sencillo de llevar con su funda adosada a un cinturón o correa. Se puede conseguir en internet por unos 230€ más o menos y funciona apuntando con su visor de 4 aumentos al objeto deseado, después se aprieta el botón superior para seleccionar y luego se vuelve a presionar una segunda vez para obtener la distancia, la cual aparece en el visor gracias a una pantalla interna de cristal líquido.

   Puede parecer una fuerte inversión pero el beneficio en tiempo ahorrado se nota de inmediato y es menor a la que se puede realizar con otras ayudas tecnológicas como los gps, etc..

ROGAINE en PEGUERINOS

   Hace meses me comentaron que se iba a organizar un Rogaine en la zona de Peguerinos (Ávila) y me alegré porque quien conoce la zona sabe que es un entorno privilegiado para la práctica de la orientación a pie. Otro tema era el que yo pudiera participar dados mis horarios laborales. Afortunadamente la alineación de planetas se dio en forma de E.R.E. y la empresa para la que trabajo cerró el fin de semana de la carrera.

   La organización del rogaine corrió a cargo de La Nova Fita (www.lanovafita.com) que no sé muy bien si funciona como club o como empresa organizadora de este tipo de eventos deportivos, el caso es que la prueba se vio revestida de todas esas cosas que a los participantes nos gustan, como son un buen despliegue de medios que “visten” la carrera y varios detalles en forma de obsequios, etc.., que se agradecen sea cual sea su valor.

   La participación me pareció bastante alta y se integraban en la misma orientadores habituales así como raiders y asistentes a las carreras de montaña. Hubo una nutrida representación de Castilla y León pero yo creo que los participantes de Madrid fueron mayoría. Un orientador madrileño comentaba ante la tesitura de participar en esta prueba o en la Liga Nacional que se disputaba en Granada que la comparativa era sencilla: “Una hora de desplazamiento y seis de orientación frente a seis horas de desplazamiento y una de orientación.”. Evidentemente no había comparación, aunque en vez de una de orientación fueran tres.

   Como yo me enteré de forma concreta acerca de la celebración del rogaine apenas una semana antes tuve que buscar rápidamente un equipo en el que integrarme y ahí jugaron un papel fundamental Lucía y Juanma que me echaron un cable importante para que pudiera participar. ¡¡¡Mil gracias!!! Los Minorri hicimos una prueba disfrutona, sin forzar pero sin fallar. Poco a poco se llega lejos y nosotros marchábamos charlando de lo divino y lo humano echando un vistazo al plano de vez en cuando y poniéndonos las pilas llegando a los controles. Todas la decisiones eran tomadas en grupo, con sentido común y sin dejarnos llevar por el stress de la competición. ¡ Qué gozada salir y llegar a la vez que algún grupo de raiders a algún control aunque ellos fueran corriendo y nosotros andando ! (¡El día que aprendan más de orientación estamos perdidos!).  

mapa-PEGUERINOS-ROGAINEEl mapa tenía zonas en las que se habían colocado planos de orientación y otras en las que la información era muy escasa por lo que nosotros decidimos centrarnos en las zonas con más detalle ya que teníamos ventaja frente a otros participantes con menos experiencia en carreras de orientación. Finalmente pasamos por 20 de los 45 controles totales y conseguimos 116 puntazos; lo malo es que nos quitaron 5 por entrar en meta dos minutos más tarde del tiempo límite. Y es que apuramos tanto porque se estaba tan a gusto que no nos hubiera importado estar una hora más disfrutando del maravilloso entorno de Peguerinos.

   Luego vienen los “y si”: Y si hubiéramos corrido un poco más, y si hubiéramos entrado en el tiempo establecido, y si hubiéramos pasado por más controles…¡Bah! Lo hecho, hecho está y yo quedé muy satisfecho con nuestra carrera. Los orientadores somos nuestros peores jueces, muy perfeccionistas y tikismikis, lo cual está muy bien si quieres mejorar…pero hasta cierto punto.

   Tras la prueba la organización preparó, con ayuda de personal del Ayuntamiento de Peguerinos, una merienda-cena a base de patatas con costilla que estaban de rechupete. También hubo degustación de queso fresco elaborado en las Navas del Marqués y de postre torta dulce. Después una animada entrega de premios y sorteo de buenos y útiles regalos para este tipo de pruebas. En fin, una prueba bien organizada, con un clima excelente y un terreno alucinante. El año que viene repetimos, ¿no?

domingo, 20 de mayo de 2012

Liga Nacional en Mortanchinos

   Tras dos días cartografiando por encargo en la comarca de Pinares me siento bastante saturado por el sube-y-baja y la lucha por dibujar con precisión un montón de elementos rocosos bajo un tupido dosel de copas arbóreas sustentadas por largos troncos de corteza gris o anaranjada. ¿Qué se puede hacer para desconectar de “escribir” un plano? Pues, por ejemplo, leerlo. Los escritores dicen que para ser escritor hay que leer mucho, los cocineros, a su vez, han de probar y disfrutar muchos platos e ingredientes y los aspirantes a cartógrafos de orientación tienen que leer (en competición a ser posible) muchos planos. Es el único modo de aprender, comparar, conocer, mejorar, compartir, etc..

   Tal vez debido a la mal llamada crisis el tráfico en las carreteras y autovías está muy mermado, lo cual, sea cual sea su motivo, es de agradecer. Yo estaba hecho a la idea de que el viaje no iba a ser largo, pero a falta de 90 kilómetros ya empiezo a estar cansado. ¿Cuando llegamos?, ¿cuando llegamos?…

   Pues llegamos al suelo duro en Villamalea y recogemos los dorsales de los participantes de nuestro club, así como unos novedosos obsequios: Unos plantones de pino para repoblar los bosques. También nos regalaron una botella de vino blanco producido en la comarca. Nuestros compañeros y amigos de otros clubes van llegando de aquí y allá. Edu, Luis y yo nos vamos al hotel reservado en Casas Ibáñez, que resulta estar “petado” de gentes de la orientación. Una masa de cálido aire procedente del Norte de África nos trae altas temperaturas de día y de noche, así que tras un sofocante periodo vespertino, desayunamos y nos dirigimos a la zona de carrera, cerca de El Herrumblar (Cuenca).

   La zona de carrera tiene muy buena pinta, con todos los servicios cercanos y bien distribuidos, así como la zona de aparcamiento. Nos ponemos junto a la autocaravana de Nico y su familia, estratégicamente colocada a la sombra de un gran pino que también alberga el último control de la prueba, así que estamos estupendamente colocados para disfrutar como espectadores de la última parte de la carrera.

   La mañana va alcanzando temperaturas más y más altas a medida que va transcurriendo. Yo salgo a las once y media más o menos y el calor es sofocante. Sin embargo tengo muchas ganas de ponerme a prueba en este terreno, que resultó duro y exigente. Las condiciones meteorológicas exigen no fallar mucho, sino seguramente rondarán la mente las ganas de abandonar. Voy comenzando la prueba y resulta que el tramo 1 – 2 presenta una interesante elección de ruta. Yo elijo una bastante directa que enlaza tramos de caminos y sendas facilitando el desplazamiento, sin embargo la concentración ha de ser máxima. Voy haciendo los controles sin grandes fallos, apenas segundos, y llego a la parte más baja en el lecho de un barranco. Al tener que volver a subir, de camino a un puesto de avituallamiento, acuso el esfuerzo y el sofoco me hacen ser prudente y reservar las energías, así que tras echar unos tragos de agua, algún interruptor se activa en mi cabeza y decido hacer el resto de la carrera más tranquilo.

Larga Mortanchinos

  El tramo 8 –9 queda condicionado por el paso por otro avituallamiento, haciendo una elección de ruta que seguramente no era la mejor pero el hecho de poder refrescarme me hacer ser esquivo a otras alternativas. A punto de salir del bosque a los últimos controles, sitos en una zona de viñedos y frutales, casi cometo el mayor error de toda la carrera buscando el control 11, aunque finalmente no lo hice tan mal.

  El paso del bosque a la zona cultivada es susceptible de provocar errores pero yo enfoco el cambio dispuesto a hacer bien los últimos controles. Sin embargo el penúltimo control casi se me resiste un poco ¡Qué ganas de terminar! ¡Venga, que ya queda poco! Llego a la meta y es hora de recuperar. Botellín de agua, vaso de bebida isotónica, barrita de cereales y puré de fruta… buena organización. Yo lo complemento con medio litro de bebida de recuperación.

  El calor hizo estragos y el porcentaje de abandonos ha sido mayor que en otras carreras. Probablemente, si yo hubiera perdido bastante tiempo en algún control también hubiera abandonado, pero no fue el caso afortunadamente. Por la tarde, tras ducha y descanso, nos reunimos un nutrido grupo de castellanos y leoneses para visitar la población de Alcalá del Júcar y su entorno. Allí visitamos la Cueva del Diablo, una curiosa cavidad artificial que su responsable ha llenado de cachivaches y aperos variados. No se parece en absoluto a las minas de sal cercanas a Cracovia, pero aquella interesante visita vuelve a mi mente.

   El domingo se disputa la carrera en distancia media. Todos salimos más pronto, de todos modos parece que no hace tanto calor como el día anterior. Me entretengo charlando y tengo que cambiarme con prisa. No me importa, vuelvo a estar activo y motivado, con ganas, si bien las ganas se me quitan un poco en la presalida, ya que finalmente me ha sobrado bastante tiempo. Empiezo la carrera un tanto acelerado y ya la cago en la primera, un tópico. Me caen un par de minutos y sigo con ganas. Voy uniendo balizas con pocos segundos perdidos y en los controles finales ya me falla la cabeza. En los últimos tramos ando algo espeso, aun sin fallar, pero ya acabando de camino al 15 me caen otros dos minutos por ver gente, relajarme, el cansancio,…, no sé.

Mortanchinos media   Voy siguiendo una evolución positiva, con buen nivel técnico y físicamente en un momento prometedor. Esta prueba ha venido a confirmar últimos progresos y ganas de mejorar. Desgraciada o afortunadamente los dos siguientes fines de semana me toca trabajar y eso significa perderme competiciones interesantes. Es tiempo de continuar entrenando lo que pueda para encarar las carreras de junio con más recursos y solvencia.

¡¡¡HAY QUE ENTRENARRRRRRRRRRRR!!!

http://www.godih.org.es/web/index.php?option=com_content&view=category&layout=blog&id=57&Itemid=92

miércoles, 9 de mayo de 2012

Vídeo curioso

  Curioso anuncio suizo en el que se pueden ver a unos ¿¿¿orientadores??? corriendo por el bosque. Desde luego la indumentaria no parece muy apropiada para meterse entre los verdes.  Me parece a mi que estos son un poco marqueses.

Anuncio Rivella con orientación

lunes, 7 de mayo de 2012

Sierra de Entzia. Parais-O Kárstic-O

   5 y 6 de mayo del 2012. Los clubes COA-Araba Y COBidea unen esfuerzos para organizar dos pruebas en la, siempre desafiante y hermosa, sierra de Entzia. Esta sierra, al Sur de Salvatierra-Agurain (Álava) constituye un paraje boscoso con unas cualidades espléndidas de cara al deporte de la orientación a pie. La roca caliza constituye el material predominante de la sierra y ésta, erosionada por la acción del agua, da lugar a una serie de formaciones geológicas propias de los sistemas kársticos. Así pues, depresiones de todo tamaño, simas, cortados, grietas, fosos, etc.., son comunes en la zona e incluso se agrupan en grandes formaciones dando lugar a verdaderos laberintos de roca. Si a esto le añadimos verdes praderas y bosques de hayas enormes pues tendremos un escenario excepcional para correr con mapa y brújula en mano.

  Las carreras eran valederas para el ranking de Liga Norte así como para una nueva liga de pruebas organizadas por clubes españoles y franceses próximos a los Pirineos ( O-Pyrene, http://opyrene.blogspot.com.es/ ). El sábado por la tarde se corría una prueba con salida masiva y en la que los recorridos se dividían en varios bucles que tenían por principio y fin un punto común. En principio pudiera pensarse que una prueba así favorecería la formación de “autobuses” pero no fue el caso en absoluto. Sí es cierto que coincidías con participantes por aquí y por allá pero no por mucho tiempo. Los recorridos se diversificaban de tal modo que cada uno hacía su carrera.

 Trebol Entzia

Yo hice el primer bucle perfecto, físico aparte ya que había comido poco pero tarde por diversos motivos y sentía el estómago raro. En el segundo perdí entre 2 y 3 minutos en el punto 7 por desviarme de mi rumbo al llegar al control, esto y encontrarme a otros corredores en dirección contraria me confundió un poco pero supe rectificar a tiempo. En el tercer bucle el desgaste físico me pasó factura y fallé en un par de controles. En el 13 me cayó minuto y pico y en el 15 la preparé con todo el equipo si bien he de decir que en esa zona el plano no me “cuadró” muy bien, echando en falta una depresión pequeña al Este de la balizada, etc... El caso es que al no ver la baliza, intenté arreglar el estropicio con una huida hacia delante y aparecí en el siguiente control, desde el que ataqué con más seguridad.

  No terminé contento con mi carrera ya que me quitaba de errores técnicos no menos de 13-14 minutos, pero finalmente mi resultado no fue muy malo siendo el mejor corredor de Liga Norte en mi categoría y cuarto en total con lo cual la conclusión es que los demás corredores tuvieron que fallar bastante más de lo que yo lo hice. Ya se sabe que de Entzia es muy difícil irse con una carrera totalmente libre de errores.

  La carrera del domingo, organizada por el club COBi, era una clásica y se utilizó una zona al Norte de la usada el día anterior. No se dieron horas de salida sino que cada uno salía más o menos cuando quería. Yo anduve algo remolón, sobre todo por digerir bien el desayuno, y comencé alrededor de las once de la mañana. Empecé la carrera con seguridad pero algo acelerado. En el cuarto control me da alcance un corredor de mi categoría que salió dos minutos por detrás y aunque ya tenía definido el elemento me hago el despistado a la hora de de picar por no levantarle la baliza. Como me apetece hacer la carrera a mi aire dejo que de camino al siguiente control se ponga por delante y vaya ampliando la distancia entre ambos. Aun queda mucha carrera y todo por decidir.

  Entzia Clásica

Al llegar a las cercanías del sexto control me confío, dejo de fiarme de la brújula y creo haber interpretado debidamente el relieve haciendo un desvío al Oeste que me aleja de la baliza unos 100 metros. Pierdo un par de minutos y el siguiente control lo hago bien, sin embargo el octavo me lleva al huerto y pierdo más de seis minutos. Seguro que pasé al lado pero no la vi y al final, para arreglar la cagada (o brownie), volví al punto anterior para volver a atacar. Al encaminarme al noveno control casi vuelvo al sexto, por aquello de que estos números se confunden al invertirlos. Ya no me quito mucho tiempo en el resto de la carrera, pero finalmente sumo unos 10 minutos de errores. Sin ellos hubiera incluso bajado de la hora y obtenido un mejor resultado, pero bueno, finalmente la belleza del lugar hace olvidar las vicisitudes de las carreras.

  Terminada la competición nos reunimos unos cuantos para compartir un surtido de ibéricos regados con unos caldos de la Ribera del Duero. Cuando tenemos ya la mesa preparada el cielo nos quiere asustar y caen unos goterones pero, al final, no descarga con ganas y nos deja comer tranquilos contemplando tranquilamente un entorno natural estupendo.

  Competir en terrenos kársticos es siempre un placer, no importa cuantas veces hayas visitado estas zonas, el desafío se renueva y es una gozada ponerse a prueba en estos planos (Entzia, Urbasa, Aralar, etc..). Además, aunque tengas tomado el pulso al criterio de la cartografía, siempre aparece algún control que puede darte un buen susto por fácil que parezca visto en frío, sin el stress de la carrera. Para poder ir a estas carreras yo tuve que pedir el fin de semana de permiso en el trabajo y la verdad es que creo que volvería a hacerlo sin pensarlo dos veces; ha merecido la pena.

http://www.sanprudencio2012.blogspot.com.es/

http://www.cobidea.com/pruebas/bizkaia-saria-2012